Emilio Bruno, reconocido empresario inmobiliario, comparte su fascinante travesía hasta convertirse en un destacado emprendedor gastronómico. En una exclusiva entrevista, desvela los detalles de su incursión en la gastronomía, la historia tras su exitoso negocio actual y sus ambiciosos planes de expansión.

Contrario a lo convencional, Bruno confiesa que su travesía en el mundo gastronómico no se gestó desde el ámbito culinario, sino desde el inmobiliario. La gestión de una galería comercial, «Muy Güemes», se convirtió en su primer contacto significativo, despertando su interés por la gastronomía y el diseño de bares al notar la preeminencia de inquilinos gastronómicos en el lugar.

Detrás de su actual emprendimiento, se encuentran varios negocios, algunos de los cuales prosperaron como «Muy Güemes» y «Como Fruta». No obstante, también enfrentaron desafíos, como los Foodmarket, experiencias que, aunque costosas, se convirtieron en valiosas lecciones. El aprendizaje se traduce en una estrategia más robusta y eficaz en la actualidad.

Bruno destaca su restaurante como un espacio único, trascendiendo la mera oferta gastronómica. Define su establecimiento como un lugar de experiencia y encuentros con la sociedad, fusionando conceptos definidos y contenido variado para ofrecer a los clientes una experiencia integral.

Enfrentando la competencia, Emilio implementa estrategias innovadoras. Mientras muchos restaurantes se centran en un atractivo Instagram, su enfoque incluye la presencia constante de DJ, arte, astrología y eventos paralelos para crear un ambiente vibrante y distintivo mientras los restaurantes están abiertos.

La inquietud y la ambición del grupo empresarial liderado por Bruno son motores para la expansión. Con socios igualmente emprendedores, están en una fase intensiva de expansión, priorizando la formación de equipos sólidos y estructuras de trabajo eficientes para garantizar el éxito sostenible del negocio.

El análisis de nuevos mercados llevó al equipo a países como Paraguay, Uruguay y Chile. Aunque Chile se presenta como un mercado prometedor, los desafíos en Uruguay y Paraguay, como la volatilidad del consumo, llevaron a decisiones estratégicas.

Bruno destaca la importancia de encontrar el punto de equilibrio en los negocios antes de buscar rentabilidades a corto plazo. A pesar de la apariencia de grandeza, se perciben como un equipo pequeño que trabaja incansablemente para alcanzar sus metas.

Con la mirada puesta en el futuro, Emiliano Bruno revela su ambición de llegar a mercados de moneda dura, como Estados Unidos. Aunque ofertas concretas están sobre la mesa, la precaución guía su enfoque, priorizando un proceso de preparación exhaustivo antes de desembarcar en mercados internacionales en el mediano plazo.